La sandía es también conocida como síndria, patilla o melón de agua, mientras que su nombre científico es Citrullus lanatus, además es oriunda de África pero se cultiva en todo el mundo. En cuanto a sus aporte calórico, destaca que solo contiene 25 calorías por cada 100 gramos debido a que el 90% es agua. En este artículo vas a descubrir cuales son los beneficios y contraindicaciones de la sandía.
Uno de los beneficios de la sandía es que es un alimento que te ayudará a mantenerte hidratado gracias a que el 90% es agua, además, es un alimento aliado para aquellas personas que desean bajar de peso debido a su poco valor calórico y su poder diurético.
Una de las contraindicaciones de la sandía es que su consumo excesivo puede generar náuseas y diarrea.
Valor nutricional de la Sandía
Nutrientes | Cantidad Por cada 100 gramos |
---|---|
Calorías | 30 kcal |
Proteínas | 0,6 g |
Hidratos de Carbono | 7,55 g (de los cuales azúcares 6,2 g) |
Fibra | 0,4 g |
Calcio | 7 mg |
Hierro | 0,24 mg |
Magnesio | 10 mg |
Fósforo | 11 mg |
Potasio | 112 mg |
Sodio | 1 mg |
Zinc | 0,1 mg |
Vitamina C | 8,1 mg |
Cobre | 0,04 mg |
Vitamina B1, B2 y B6 | 0,12 mg |
Vitamina B3 | 0,178 mg |
Selenio | 0,4 μg |
Folato | 3 μg |
Vitamina A | 28 μg |
Vitamina K | 0,1 μg |
Propiedades y beneficios de la sandía
[adinserter block=»1″]
Es muy hidratante
Uno de los beneficios de la sandía es que te ayudará a mantenerte hidratado ya que es una de las frutas más ricas en agua, ya que el 92% de su peso es solo agua. Su contenido de agua es muy importante y puede ser una excelente alternativa para las personas que no consumen suficiente agua en el día.
Comer sandía te ayudará a aumentar tu ingesta diaria de agua y esto es muy beneficioso porque reduces el riesgo de sufrir de deshidratación. Además, consumiendo esta fruta le brindas a tus células el agua que tanto necesitan para funcionar correctamente.
Rica en nutrientes
La sandía es una fruta increíble con una densidad nutricional muy importante. Una de sus mayores cualidades es que su aporte calórico es tan bajo que resulta ser casi insignificante. Una taza de sandía solo aporta 25 calorías y esto es debido a que el 92% de ese peso es solo agua, por lo que no afecta significativamente tu ingesta calórica diaria.
Además, la sandía contiene algunas vitaminas esenciales como la vitamina C y la vitamina A. Asimismo, la sandía contiene algunas vitaminas del grupo B en menor cantidad, tales como la vitamina B1, B2, B3, B5 y B6. Con respecto a su aporte mineral, este fruto contiene algunos minerales esenciales como el potasio, el fósforo y el magnesio.
La sandía también esta enriquecida en compuestos vegetales y poderosos antioxidantes como los betacarotenos y el licopeno. Adicionalmente, la sandía ofrece un importante aminoácido llamado citrulina.
Antioxidante
Otro de los beneficios de la sandía es que ayuda a prevenir el daño oxidativo del organismo gracias a su gran contenido en antioxidantes. Estas sustancias antioxidantes combaten los radicales libres que se producen en el metabolismo y que se acumulan en el cuerpo.
A pesar de que los radicales libres se producen como un desecho del proceso metabólico, deben ser eliminados porque su aglomeración puede desencadenar el estrés oxidativo.
La vitamina C es uno de sus antioxidantes más abundantes y es uno de los más poderosos. Este antioxidante protege al organismo ante los radicales libres, previene el daño en el ADN celular por los radicales libres y evita la degeneración del colágeno del cuerpo.
La vitamina A también es otro importante antioxidante de la sandía que se encuentra en el fruto como carotenoides y betacarotenos precursores. Es muy importante para prevenir el estrés oxidativo y ayuda a proteger el tejido ocular del daño oxidativo.
Asimismo, la sandía contiene otros compuestos antioxidantes como la cucurbitacina E que combate eficazmente a los radicales libres y el estrés oxidativo.
Según evidencia científica, el estrés oxidativo es uno de los principales desencadenantes de algunas enfermedades crónicas como las afecciones cardiacas, eventos cerebrovasculares, diabetes, etc.
Por ello, resulta tan importante ingerir suficientes antioxidantes y, sin duda, la sandía puede ser una excelente alternativa para ello.
Puede tener un efecto anticancerígeno
Aunque la evidencia científica es bastante limitada, se ha determinado que la sandía puede tener un efecto anticancerígeno muy eficaz. Según investigaciones, el antioxidante licopeno de la sandía se ha relacionado con un menor riesgo a sufrir de cáncer en el sistema digestivo.
Asimismo, se ha determinado que la cucurbitacina E de la sandía puede ser útil para inhibir el crecimiento tumoral. Otras investigaciones han determinado que los antioxidantes de la sandía también reducen el factor de crecimiento simular a la insulina, siendo dicho compuesto vinculado con la actividad cancerígena.
Sin embargo, aún se necesitan muchas más investigaciones que puedan afirmar este posible beneficio de la sandía.
Favorece tu salud cardiovascular
Gracias a su gran densidad en nutrientes, otro de los beneficios de la sandía es que puede ser un gran aliado de la salud cardiovascular. Este fruto es muy rico en antioxidantes y, por ello, su consumo puede reducir el riesgo de daño oxidativo en el tejido cardiovascular.
Según las estadísticas, el daño oxidativo suele ser el desencadenante de algunas afecciones cardiacas crónicas como los eventos cerebrovasculares, daño arterial, enfermedades coronarias, etc.
Sin embargo, el licopeno de la sandía resalta como uno de sus antioxidantes más poderosos y beneficiosos para la salud cardiaca. Los científicos aseguran que el licopeno puede disminuir los niveles de colesterol en sangre y reducir la rigidez en la pared arterial.
Asimismo, se ha determinado que el licopeno puede reducir el riesgo a sufrir de eventos cerebrovasculares porque atenúa algunos de los principales factores desencadenantes como el colesterol alto o la presión elevada.
Gracias a su contenido en potasio, otro de los beneficios de la sandía es que actúa como un vasodilatador natural muy efectivo, es decir, ayuda a regular la presión arterial. Además, el potasio puede contrarrestar los efectos estimulantes del sodio sobre la presión arterial.
Adicionalmente, la sandía contiene citrulina que promueve la formación de oxido nítrico, siendo esta sustancia el principal vasodilatador del organismo. Un mayor contenido de oxido nítrico te ayudará a controlar tu presión arterial y prevenir el daño arterial.
El magnesio, la vitamina A, vitamina C y vitaminas del grupo B de la sandía también juegan un papel fundamental en la salud cardiaca. En conjunto, los nutrientes de este fruto son esenciales para disfrutar de un corazón sano y fuerte.
Antinflamatorio natural
Otro de los beneficios de la sandía es que puede ser un antinflamatorio natural muy poderoso y esto ocurre porque contiene abundantes antioxidantes con cualidades antinflamatorias. Generalmente, las inflamaciones crónicas del organismo suelen desencadenarse por el estrés oxidativo, por lo que los antioxidantes pueden combatir la hinchazón desde la raíz.
Según un estudio realizado, el licopeno de la sandía es capaz de reducir los niveles de biomarcadores proinflamatorios como la PCR. Al disminuir las cantidades de la proteína C reactiva disponibles en sangre, también se reducen las respuestas inflamatorias.
Combatir las inflamaciones crónicas es completamente necesario, ya que estas suelen provocar daños tisulares y se vinculan con una mayor prevalencia de enfermedades.
El consumo de sandía también podría aliviar algunas enfermedades inflamatorias como la artritis reumatoide. De esta manera, figura como una opción complementaria para reducir la hinchazón y promover el alivio.
Mejora tu visión
Uno de los beneficios de la sandía es que es una fruta muy rica en algunos componentes que te ayudaran a mejorar tu visión. Su contenido en betacarotenos, licopeno y vitamina A es impresionante, por lo que puede ayudarte a combatir algunos problemas oculares comunes.
La vitamina A es reconocida por ser un gran aliado del sentido de la vista, ya que fortalece la retina, mejora la visión nocturna y previene la ceguera. De hecho, este es uno de los nutrientes más esenciales para la vista porque también cuenta con características antioxidantes.
La vitamina C de la sandía también ayuda a prevenir algunos problemas de retina y actúa como un protector del ojo ante la radiación ultravioleta del sol. Sus cualidades antioxidantes también protegen el tejido ocular del estrés oxidativo.
El licopeno de este fruto también se ha relacionado con una excelente salud ocular porque combate el daño oxidativo y reduce la inflamación de los ojos. Según investigaciones, el licopeno puede ser vital para retardar la aparición de la degeneración macular relacionado con la edad.
Alivia el dolor muscular
La citrulina es uno de los componentes más beneficiosos de la sandía y los científicos aseguran que es una gran aliada de los deportistas. Diversas investigaciones han demostrado que el consumo de citrulina puede ser útil para reducir el dolor muscular producido por una actividad física vigorosa.
En los estudios realizados, la ingesta de jugo de sandía mejoraba la absorción de la citrulina y esto se traducía en menos dolores musculares y una mayor resistencia física. Además, el tiempo de recuperación luego del ejercicio disminuyó considerablemente al consumir la citrulina.
Es bueno para tu cabello y tu piel
Uno de los beneficios de la sandía por ser rica en vitamina C y vitamina A es que su ingesta beneficia tu cabello y tu piel significativamente. En principio, la vitamina C es un componente necesario para la producción de colágeno, por lo que su consumo te ayuda a sintetizar más colágeno.
El colágeno es una de las proteínas estructurales más importantes del organismo porque fortalecen el tejido conectivo, muscular y cartilaginoso de tu cuerpo. Además, el colágeno está en tu piel y cabello, por lo que necesitas suficiente colágeno para disfrutar de una piel y un cabello saludable.
El aumento de la producción de colágeno fortalece la fibra capilar, favorece el crecimiento del cabello y le da flexibilidad a tu cabello. Asimismo, tu piel se vuelve mucho más elástica, mientras adquiere volumen y firmeza.
La vitamina A de la sandía también es muy importante para tu cabello y tu piel. Este nutriente protege el tejido cutáneo de los rayos UV del sol y del fotoenvejecimiento, promueve la reparación celular y le confiere suavidad a la piel. Adicionalmente, fomenta el acelerado crecimiento de un cabello sano y fuerte, mientras que fortalece los folículos capilares de tu cuero cabelludo.
El licopeno también será vital para el cabello y la piel porque evita que el estrés oxidativo acelere el proceso de envejecimiento. Se ha evidenciado que el licopeno también puede proteger la piel ante los rayos solares.
Mejora la digestión
Debido a su gran contenido de agua y fibra, otro de los beneficios de la sandía es que puede mejorar tu digestión de forma significativa. La fibra es muy importante para el sistema gastrointestinal porque confiere regularidad en las deposiciones y mejora el transito intestinal.
El agua, por su parte, ayuda a que el sistema se encuentre en constante movimiento. También ayuda a que las heces adquieran un tamaño y textura adecuado, siendo ideal para combatir el estreñimiento.
Su consumo puede conferirle algo de regularidad al sistema, por lo que es ideal para aquellas personas con problemas de estreñimiento o dificultad para ir al baño.
Estimula la función cerebral
La sandía contiene un compuesto químico llamado colina que puede estimular y repotenciar la función cerebral. La colina es necesaria para transmitir eficazmente los impulsos nerviosos a través de todo el organismo.
Asimismo, es necesaria para estimular algunas funciones cognitivas como la memoria y el aprendizaje. También puede mantener la estructura de las membranas celulares y facilitar el movimiento muscular.
Según investigaciones, la colina y los demás antioxidantes de la sandía resultan ser claves para retardar el desarrollo de Alzheimer y la demencia. De hecho, se ha demostrado que los antioxidantes reducen la inflamación del tejido cerebral y, con ello, reduce el riesgo de desarrollar Alzheimer.
Tiene un efecto diurético
Otro de los beneficios de la sandía por su riqueza en agua es que es una fruta con un excelente efecto diurético. El consumo de sandía aumenta la cantidad de agua que entra al organismo y, con ello, incrementa la tasa de filtración renal.
Es decir, aumenta la cantidad de sangre que es filtrada en los riñones y esto produce una mayor micción de orina. Debido a que aumenta la filtración, también se eleva la cantidad de toxinas y desechos que son expulsados del organismo mediante la orina.
Este efecto diurético puede ser muy útil para fortalecer el riñón, limpiar las vías urinarias y estimular un torrente sanguíneo más puro. También es clave para combatir la retención de líquidos, ya que fomenta la eliminación de líquidos y sodio acumulado.
Artículos relacionados
Contribuye con la pérdida de peso
Uno de los beneficios de la sandía más conocidos es que puede ser una excelente elección cuando estas en plan de perdida de peso, ya que es un alimento muy bajo en calorías y con un excelente aporte de agua.
Según la evidencia científica, los alimentos bajos en calorías y ricos en agua son increíbles para mantenerte saciado por más tiempo y consumir una mayor cantidad de comida sin que afecte significativamente tu ingesta calórica diaria.
Además, la sandía es una de las frutas con menos azúcar y posee 0 grasas, por lo que es excelente durante una dieta hipocalórica. El consumo frecuente de sandía se ha vinculado con menor índice de grasa corporal y menor riesgo a sufrir de obesidad.
Contraindicaciones o efectos secundarios de la sandía
[adinserter block=»2″]
Personas con insuficiencia renal
Entre las contraindicaciones de la sandía está que no se debe abusar de ella en personas que sufran insuficiencia renal debido a que la Sandía tiene un rica en potasio.
Personas con síndrome de colon irritable
Debido a su contenido en fructosa, debe ser consumida con moderación por aquellas personas que sigan una dieta para tratar el síndrome del colon irritable.
Náuseas, diarreas, indigestión e hinchazón
Otra de las contraindicaciones de la sandía si se consume en exceso es que puede generar náuseas, diarreas, indigestión e hinchazón debido a que podríamos estar consumiendo más de 30 mg de licopeno al día.
Personas con hipercalemia grave
Otra de las contraindicaciones de la sandía es que su consumo no está recomendado en personas que sufran hipercalemia grave ya que la sandía es rica en potasio.
¿La sandía ayuda a adelgazar?
Si, la sandía puede apoyar dietas para la pérdida de peso gracias a su alto contenido de agua y por consiguiente poder diurético, también por su baja cantidad de calorías y aporte de L-arginina, cuyo poder es acelerar el metabolismo y facilitar la pérdida de grasa corporal.